martes, 23 de diciembre de 2008

La Revolución mexicana, el pueblo no perdona los agravios.

No me preguntes ¿por qué? Recuerda cuando soberbio veías a los de abajo con menosprecio, cuando creías que tú y tu grupo serían los únicos que podrían dar una explicación a la realidad y proponerle cosas. Los liberales jamás entendieron al pueblo campesino, jamás entendieron sus razones, hicieron ojos cerrados a sus carencias.

En la foto, los zapatistas toman café en Sanborns, un lugar que era para la clase acomodada del porfiriato. No son diferentes a los miembros de la APPO, tampoco a los campesinas alzados por el EZLN, se parecen mucho más a los campesinos del Frente por la Defensa de la Tierra que encabezan los dirigentes de San Salvador Atenco, recuerden esta escena y luego no pregunten ¿por qué? ¿por qué el pueblo se levanta? Se preguntan porque han minimizado los agravios, se han desentendido de los golpes que les dieron cuando ellos, los más pobres iniciaban la resistencia. Cuando recorría las asambleas de Andrés Manuel López Obrador conviví con personas muy humildes, estos zapatistas no son diferentes a la gente más humilde de Tepito, la Guerrero, de los que vienen desde el cerro en Tlalpan, el sur del DF, recordemos, Milpa Alta fueron zapatistas y luego neozapatistas y finalmente miembros de la Convención Nacional Democrática al sur.

Cuando leo en los foros a la gente que donosta a los amloístas, a los perredistas, a los miembros de la APPO, a los zapatistas del EZLN, a los de San Salvador Atenco, recuerdo en el pasado cundo denostaban a los estudiantes en lucha, a los guerrilleros del Partido de los Pobres, a los estudiantes de la Liga 23, no alcanzan a entender las razones del pueblo, las razones profundas de porqué debe existir una izquierda en el país. No me gusta, en verdad, la violencia. Pienso que Madero tenía razón en querer hacer los cambios por dentro, de manera pacífica, por medio de los mecanismos que el Estado se da para que la transición sea aterrizada por un sociedad diversa. Pero en el recorrido me doy cuenta que son los que quiere impedir desde el poder los cambios necesarios, quienes son finalmente los responsables de que los que nada tienen jueguen lo único que les queda su vida.

La derecha no entiende el poder de la izquierda, la izquierda muchas veces no entiende que si tuvieran mucho mayor unidad, sería más fácil impedir que la derecha tenga el poder y desde él reprima. Yo no soy miembro del FZLN, tampoco milito con la otra, no pertenezco al PRD, como tampoco creo ciegamente en AMLO. Pero creo que para poder derrotar al conservadurismo, de manera democrática, es necesario que la izquierda social y la izquierda electoral empujen un cambio necesario, que la derecha responsable entienda que los cambios también son necesarios. No queremos muertos, no queremos sangre, queremos un cambio democrático pacífico, estamos a tiempo, si el pueblo se vueve a levantar, la sociedad civil demostraría su incapacidad para los cambios que requiere el país.

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